sábado, 27 de junio de 2015

SEIS RAZONES PARA ODIAR LOS ABDOMINALES

Los que me conocéis o habéis entrenado conmigo sabéis que estoy en contra de los abdominales clásicos, los de toda la vida, los temidos “crunches”  que todavía se siguen manteniendo en muchos gimnasios. Aquí tienes las razones por las que no debes practicarlos.

  • Cuando haces un crunch tu columna vertebral soporta una fuerza de compresión de 340 kilogramos. Un nivel muy superior del que recomienda el Instituto Nacional para la Seguridad y Salud Ocupacional. De hecho los abdominales empeoran los problemas de espalda.

  • Al realizar un crunch, trabajas los músculos superficiales del abdomen y los flexores de cadera, acortándolos en cada repetición. Esta musculatura ya está acortada de por sí debido a la actividad cotidiana, no tiene sentido acortarla más en cada sesión de entrenamiento. Además debilitan el core, lo que provoca dolores de espalda, disfunciones en el suelo pélvico como la incontinencia urinaria y los prolapsos.

  • No conseguirás un abdomen plano. La próxima vez que vayas al gimnasio, observa a la gente haciendo abdominales y presta atención a su abdomen, te darás cuenta que protubera, lo contrario del objetivo del ejercicio

  • Los crunch generan una gran presión  en la cavidad pélvica y en la abdominal, esto contribuye a que se genere la diástasis de los rectos abdominales (separación del la musculatura) tanto en hombres como en mujeres.

  • Un estudio ha demostrado que el 52% de las mujeres con disfunción de suelo pélvico tienen diástasis de rectos. Esta diástasis es normal durante el embarazo. El error viene después, cuando al intentar perder la "barriguita" y tonificar la musculatura comienzan a machacarse a abdominales.  La diástasis empeora por la presión ejercida en la pared abdominal debilitada, pero también esta presión se refleja en la musculatura pélvica provocando incontinencia

  • Este aumento de presión que se genera al hacer abdominales, sobre una musculatura disfuncional hace que los órganos internos sean empujados hacia abajo. El estilo de vida sedentario, el auge de programas de gran impacto, la falta de conciencia en la recuperación del embarazo y post-parto han generado un aumento de los prolapsos en mujeres muy jóvenes.  Durante el puerperio la mayoría de las mujeres comienzan a hacer abdominales para recuperar el tono muscular y su abdomen, sin darse cuenta que estos ejercicios afectarán a su posterior calidad de vida.
Fitbeat by Natalia Gómez


Hay otros métodos, más seguros,  más eficaces para poder mantener una musculatura abdominal tonificada y un abdomen plano. En breve haré otro post hablando del método hipopresivo, con todos los beneficios para la espalda y la musculatura abdominal.

jueves, 25 de junio de 2015

10 TIPS PARA CONSEGUIR ADELGAZAR CON EXITO

  • Haz 5 ó 6 comidas al día. Come cada 2 ó 3 horas

Esto es clave para bajar de peso. El objetivo es mantener tu metabolismo alto. Tu cuerpo dispondrá de más energía para consumir ¡Ojo! Esto no significa que te atiborres a comida. Menos cantidad, más veces.

  • ¡Proteínas!!!!!

Esto no es negociable. Cada vez que comas debe haber una fuente de proteínas. Identifícala en tu menú, si no la encuentras añádela. Recuerda que debe haber un mínimo de 15 grs por comida. La proteína hace que el cuerpo metabolice una gran cantidad de calorías para su descomposición.

Fit-beat by Natalia Gómez

  • Comida post-entreno

Inmediatamente después de tu sesión de entrenamiento, con el fin de mantener el metabolismo en marcha y asegurar que tu cuerpo quema grasa y no el músculo que acabas de trabajar, prueba con un batido que lleve 15 gramos de proteína y entre 30-40 gramos de carbohidratos. Te dará margen para que llegues a tu próxima comida importante del día sin que asaltes la nevera.

  • Elige comidas sencillas

No quieres volverte loco pensando en 6 comidas diarias. Hazlo fácil.
Desayuno, el kit que no falla: avena, proteína (soja texturizada, pavo, jamón,..) y fruta. Añade semillas y tienes los ácidos grasos esenciales.
Almuerzo y merienda: seguimos con las proteínas (huevos: mejor claras, atún, pavo, jamón,…) añade algún fruto seco, lo que te quepa en la palma de tu mano al día.
Post-entreno: Tal y como hemos comentado proteínas de nuevo, es la hora de la segunda pieza de fruta diaria. De ahí obtendrás los carbohidratos que necesitas.
Solo te quedan dos, la comida y la cena. Como el desayuno son dos de las tres importantes, así que deben contener, carbohidratos, proteínas y grasas.

  • Cocina para toda la semana.

Es más sencillo que hagas una planificación semanal. Si además cocinas por anticipado puedes preparar más de una ración y luego distribuirlo en tuppers individuales.

  • Planifique y prepare

No planificar es fracasar. Planifica los horarios de tus comidas, el momento para cocinar. Apunta los acontecimientos especiales que puedan cambiar tus rutinas. Si coinciden con tus comidas y vas a caer en la tentación, come algo sano antes de salir de casa. Así picotearás menos.

  • Renueva tus armarios

Elimina la comida basura que tengas en casa, haz limpieza. Deshazte de los alimentos poco saludables. Lo que no tengas no te lo comerás.

  • 1 cheatmeal a la semana

Los cheatmeals son importantes. Tanto física como emocionalmente, estimulan el metabolismo, y te hacen tener más control sobre tu plan de dieta.
Disfrútala con amigos, con tu pareja. Resérvala para una ocasión imprevista.

  • Beber 2 litros de agua al día

Debes beber entre dos y tres litros al día. Es importante que estés hidratado, más si estás practicando entrenamientos de alta intensidad.

  • Toneladas de verduras.

La verdura cruda es increíble para la pérdida de grasa. Son bajas en calorías, te sacian. Introduce verduras en tus comidas principales. Además son un perfecto multi-vitamínico. 
No te olvides de los batidos verdes, saciantes y perfectos para tus almuerzos y meriendas.


domingo, 14 de junio de 2015

Pautas para convertirte en un gran "runner"

Últimamente sales a la calle y cada vez ves a más y más gente que ha convertido el running el su deporte preferido. Es una manera de realizar ejercicio fácil y barata. Sales de casa y puedes empezar a practicarlo. Eso sí, no sirve con salir a la calle y echar a correr.


¿Quieres ser corredor y no sabes cómo empezar? Aquí tienes mis consejos para conseguirlo.

Fit-Beat Logroño, pilates, hipopresivos, HIIT, nutrición, entrenos
Fit-Beat by Natalia Gómez

Invierte en el calzado

Las deportivas son importantes, elige bien o terminarás con alguna lesión. No te fijes en el color o en si te gusta el modelo. Déjate aconsejar por un profesional. El calzado debe ser cómodo y adecuarse a tus necesidades.

Prepárate

Como cualquier ejercicio que te propongas hacer necesita el equipo adecuado. Planifica el entrenamiento, cuando ir, qué comer y qué vestir. La ropa debe ser la adecuada y absorber el sudor, comprueba el tiempo que hace, lluvia, sol. También necesitas planificar las comidas, no correrás igual si estás lleno o muerto de hambre.

Comienza despacio

No esperes correr durante 5 kilómetros el primer día. Puede que al principio te cueste hasta correr durante 1 minuto seguido. Mantén unas expectativas realistas, muévete a tu ritmo y camina cuando lo necesites. Lo mejor es que busques un plan para llegar a correr durante 30 minutos seguidos.

Calienta y estira

Cada entrenamiento debe comenzar con unos minutos para calentar tus músculos. Termina con estiramientos te ayudará a aliviar la carga muscular, prevenir lesiones y aumentar la flexibilidad. 

No te quedes sin combustible

Recupera tu musculatura con una comida post-entreno. Asegúrate de que incorpora los nutrientes que necesitas, carbohidratos y proteínas. Hidrátate después de correr, así como a lo largo del día.

Varía tus entrenos

Una vez que seas capaz de correr durante 30 minutos, avanza hasta el siguiente nivel. No ejecutes la misma rutina, alterna rutas, incorpora el entrenamiento a intervalos.

Aumenta la distancia progresivamente

Es posible que ya estés preparado para correr durante más tiempo. Un aumento demasiado rápido puede provocar lesiones, rodillas, talones,… Prueba a aumentar un 10% de semana en semana.

Marca objetivos

Igual que en cualquier otro tipo de entrenamiento las metas te ayudarán a mantener la motivación. Tendrás más posibilidad de tener éxito si tus objetivos son realistas. 

Sal a la calle

Si corres sobre cinta, ha llegado el momento de salir a la calle. El aire libre con un terreno variado, fortalecerá tus músculos. Ten en cuenta que correr al aire libre es más complicado que  hacerlo sobre la cinta. 

Mantén la seguridad

La seguridad es lo primero, así que si decides salir a correr solo, informa a alguien de tus rutas. Presta atención al tráfico, usa ropa reflectante, sobre todo si corres de noche.

Controla la postura

No todo es lanzarse a la calle a y  echar a correr. Trabaja la postura y la alineación. Visualiza esta imagen y mantenla en tu mente mientras corres, relaja el cuello, levanta las rodillas, involucra tus músculos abdominales, mantén los brazos paralelos al suelo.

Crea estrategias

Ya estás acostumbrado a correr, comienza a trabajar con diferentes estrategias que harán de ti un corredor más rápido y mejor.
        Sprint a intervalos: Mezcla tu entrenamiento con intervalos esprintando 
        Hill: Busca pendientes, una colina, aumentarás la resistencia.

Entrenamiento de fuerza

Si quieres convertirte en un corredor completo necesitarás algo más que correr. Practica ejercicios complementarios, trata de realizar un entrenamiento de fuerza dos veces a la semana.

Se constante


No hay ningún secreto para convertirse en corredor, es cuestión de entrenamiento. Si has seguido estos consejos habrás aumentado tu resistencia y velocidad. Ahora no lo dejes, mantente constante, programa tus carreras cada semana, así no te quedarás en el sofá.